¿Qué otra cosa puede
ser estarse un montón de horas encaramado en lo alto de una farola? ¡Gamberro!
Si la policía, y sobre todo los jueces, fueran como deben ser, no ocurrirían
estas cosas.
Ni es el primero, ni
será el último en hacer el numerito. Sólo en un ratito he localizado estas
fotografías.
Unos lo hacen para
divertirse.
Otros para que les miren.
Y habrá seguramente quien lo haga por
estar de los nervios.
No creo que el de
hoy, en Melilla, tuviera ganas de reír o de maravillar; y de beber, cero
patatero.
¡Cómo será el lugar
de donde vino! Ha preferido estar ahí arriba antes que volver.
Ahora ya puede
descansar, aunque el CETI no sea, precisamente, un hotel de cinco estrellas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario