Me niego a poner la Internacional. Y no por motivos ideológicos, que no. Me niego a ponerla porque ya está en otras partes. Tengo a gala también recorrer caminos menos trillados. Tampoco es que sea una rara avis, pero de alguna manera el Brassens que conocí a través de Paco Ibáñez quedó grabado en mí.
Por supuesto en donde pazo todo el mundo trabaja. Bueno o no trabaja porque está en paro. También hay jubilados, cada vez menos, o cada vez más, según se mire, porque hay demasiadas empresas que hace tiempo ya empezaron con las anticipaciones en este orden de cosas.
Pero lo mío era con la chavalada, más bien. Y claro con ellos parece que no pegaba cantar la Internacional, eso que gritaban tan serios, puño izquierdo cerrado y brazo del mismo lado del cuerpo levantado. A la chiquillería, y a mí también, ese gesto como que le resultaba una pizca amenazante.
Nosotros nos juntábamos aparte, teníamos nuestras juergas inocentes, y por supuesto también cantábamos, pero no sus canciones sino las nuestras. Y nuestras canciones tenían tanta miga, al menos, como las suyas, las de los mayores.
Por eso, hoy, día 1 de mayo, recuerdo esta canción, que hace la tiiiiiiiiira de tiempo que no canto, ni solo ni acompañado. Hoy me ha dado por ponerla aquí, y como no tengo manera de añadir la música, coloco sólo la letra. La melodía que se la imagine cada cual a su manera.
Hombre, y ya aprovechando la conyuntura, a quien se acerque por aquí y sepa cómo hacerlo, que me lo diga, oye, que nos diga a todos como grabar música desde el ordenador para ponerla en el blog, que seguro que hay alguna forma de hacerlo. Sólo que quien no sabe es como el que no ve. Pues, eso, que por ahí no se ve eso, y nos gustaría que se viera, y también se oyera.
CUANDO YO SEA GRANDE
Y tu padre que hace,
mi padre es albañil.
Es el más noble de los oficios
pues de él dependen
los edificios de la industria,
los hospitales y los palacios residenciales.
Mi padre dice que gracias a eso
a todas partes llega el progreso.
Cuando yo sea grande
voy a ser como él. (bis)
Y tu padre que hace,
mi padre es labrador.
Sabe de plantas y de animales
y de cosechas y de frutales.
Y es un oficio más importante
que hacer palacios como gigantes.
Mi padre dice que no habría nada
sin que la tierra fuera labrada.
Cuando yo sea grande
voy a ser como él. (bis)
Y tu padre que hace,
mi padre es general.
Ahora hace tiempo que no le veo
porque en la guerra tiene su empleo.
Él no hace casas ni labra tierras,
pues se dedica sólo a la guerra.
Sabe de bombas y bombardeos
que hacen pedazos pueblos enteros.
La última noche que me dio un beso
me estuvo hablando tan sólo de oso.
Dice que tiene armas venenosas
que matan todo: seres y cosas.
Mueren los hombres y las mujeres,
pájaros, flores, todos se mueren.
Hasta las niñas también se mueren.
Como las madres también se mueren.
Y los abuelos también se mueren.
Cuando yo sea grande
no seré como él. No, no, no.