Para el concierto de
hoy, que era de pulso y púa, pensé hacer encaje de bolillos. Y como no sé nada
sobre nada respecto de esa materia, me puse a buscar…
Lo que encontré me
pareció muy complicado. De modo que corté por lo sano y puse en funcionamiento
mis habilidades naturales.
Al parecer no debió
salir tan mal, porque todo el mundo se hacía lenguas de ello. Incluso más de una
preguntó qué floristería lo había suministrado.
¡Hay que ver!
Con buenos
ingredientes, hasta un manazas hace alta cocina… Ja, ja, ja.
2 comentarios:
¡¡¡¡Precioso centro!!!!! Me encantan las lilas (ya te lo he contado otras veces) así que soy una más a alabar tu buen hacer en este menester. ¡Ah!, y cuando necesites encaje de bolillos no dudes en llamar a tu amiga y hermana mía que sabe y hace cosas preciosísimas.
Besos, floristero mayor del reino!
¿Cada vez madrugas más o es que tardas demasiado en acostarte? No sé si decirte buenos días o feliz descaso.
Besos aromáticos. Aunque la verdad es que este año huelen bien poco, incluso están empezando a agostarse esas lilas apenas abiertas.
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