Entre que era domingo y me debía a mis obligaciones y
que estuve ocupando los tiempos libres en subir videos a youtube para mi
publicación de ayer, además de acercarme religiosamente a la otra mesa para
depositar el voto y alguna otra cosilla más, no me ocupé ni preocupé en
absoluto de cuál pudiera ser el resultado final de esta jornada en la que
gozosamente se concentra toda nuestra actividad democrática.
He de decir que también fui engañado por los futurólogos;
me creí a pies juntillas el resultado que pronosticaban. No tengo palabras.
Claro que tampoco hacen falta; a la vista está. Dígase lo que se diga, todos
han ganado, nadie tiene que repasar lo hecho y dicho en este tiempo, y a partir
de ahora… más de lo mismo.
Reconozco que estoy sorprendido. Aún así, no me
pesa. Al contrario, estoy deseando que sigan sorprendiéndome. A ver con qué nos
salen ahora…
Por mi parte, sigo en la pura normalidad. Eso creo,
al menos. Acabo de entregar mi muestra para que la analicen, porque mi médica
favorita quiere que pase control anual. Sea pues. En esto no espero novedades
que resulten preocupantes. Ya veremos…
No hay comentarios:
Publicar un comentario