El orden de los factores no altera ni la suma ni el producto, pero sí modifica sustancialmente otros procesos mucho más delicados y con frecuencia mucho más transcendentes por las consecuencias que acarrean se realicen de una u otra manera.
No es en absoluto este el caso, porque aquí se trata de exponer, o sea mostrar, algunas de las cosas que hace mi gente cuando se pone de fiesta. Que, dicho sea de paso, últimamente ocurre muy de tarde en tarde.
Ya puestos, hay que decir que este año mi barrio, bueno exactamente uno de muchos pero sí el que me resulta más querido, de La Cañada celebra que hace treinta y cinco años empezó a asociarse para defenderse, en tanto que se constituía a sí mismo como tal barrio. Hasta entonces apenas eran dos hileras de casas molineras con un lodazal de por medio en invierno; en verano, un desierto polvoriento.
En el año 1976 nació la Asociación de Vecinos. Se puso un nombre, porque entonces la barriada también se llamaba de otra manera, y luego se lo cambió por otro, al tiempo que el Paseo de Zorrilla se prolongaba a través de él. Pero siempre quedó en la memoria como Cañada de Puenteduero. Luego fue Prolongación del Paseo de Zorrilla. Ahora es La Cañada Real. Cosas de las ciudades, sus administraciones y sus circunstancias.
A lo que voy es a que estamos celebrando el 35º Aniversario, y por este motivo las fiestas, también movibles, que no móviles, se han engordado este año en torno a los días 1, 2 y 3 de Julio.
Ayer la cosa comenzó con la presencia de una representación del Ayuntamiento con el Alcalde a la cabeza en un acto de recuerdo y exaltación de una historia corta pero querida para quienes por aquí andamos ya peinando canas.
Hubo palabras, hubo homenajes, hubo imágenes, y hubo música. Todo producto de los propios vecinos. No hizo falta requerir de lo ajeno.
Las palabras ya están puestas casi todas. Las que faltan saldrán no tardando. Es lo que decía antes del orden de factores o sumandos.
Los homenajes se hicieron y no pueden repetirse. Todas las personas que integraron las sucesivas directivas subieron al escenario para recibir el aplauso y los vítores que se merecían. También un pequeño recuerdo.
Las imágenes también llegarán, en cuanto los que las tienen me las aporten. Se trata de un reportaje fotográfico de la historia del barrio y sus pobladores.
La música ya está enlatada, pero está por medio Youtube y se toma su tiempo; es insensible a los ruegos y totalmente insobornable. De modo y manera que habrá que esperar.
Visto cómo está el asunto, adelanto ahora lo que debería venir después. Se trata de la exposición de los trabajos manuales. Esta vez Youtube se dejó colar un gol y os lo puedo ofrecer. Esto es lo que han hecho, o al menos lo más vistoso, durante este curso en el Taller de Bolillos:
Ahora hemos estado departiendo con un vaso de limonada en una mano y una pasta de la tierra en la otra. Hablar así no es fácil, porque polvorones, mantecados de Portillo y pelusos, cuando entran en la boca te prohíben terminantemente dirigir la palabra a persona alguna, bajo amenaza de embadurne del de enfrente.
Y a continuación, y hasta que la autoridad lo determine, sonará la música y se moverán los cuerpos y sus respectivas almas al ritmo que sea menester.
Y ya está por hoy. Mañana posiblemente habrá algo más. Pero el orden… poco importa, cuando el resultado final sale cuadrado.
2 comentarios:
¿Lo de cuadrado es por la cuadratura del círculo? Porque se suele decir que ha salido redondo.
¡Pues tienes razón! Pero también yo. Generalmente se redondea al final, y el pico se lo queda la otra persona. Aquí no; el balance se cuadra, y sale exacto.
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