Para reír de pura tristeza

Cómo os muráis vosotros dos, a nosotros nos entierran, dijo el “N”* ayer, viernes 13 por la mañana, mientras retiraba un lote de alimentos para su familia.

Aún no lo sabía; porque, si llega a enterarse de que en ese momento el jefe del estado español, mientras cae lo que está cayendo, cazaba elefantes en el África tropical, capaz hubiera sido de coger un escobón y largarse allá a darle con él en el culo.

Sería para partirse el eje a risotadas… si no fuera tan dramático.

* N tiene nombre propio, y también nombre común; pero ni el uno ni el otro puedo ponerlos aquí, ya es triste. Sólo el rey carece de tejado de cristal. El resto, plebeyos al fin y a la postre, lo tenemos transparente. Una pena.