Pero no por lo que los medios se han esforzado tanto en aderezar ante
esa fecha que hoy toca, el 9N, que mayormente no me afecta. Lo mío es mucho más
trivial y de andar por casa. Resulta que, con el cambio en el plan pastoral
diocesano, hay que proponer a los jovencitos y jovencitas a partir de los doce
años que se preparen para recibir la Confirmación. Esto significa que hay que
habilitar espacios y personas que se apliquen a este nuevo menester, porque
todo lo demás debe seguir funcionando con normalidad.
Lo del espacio, afortunadamente, no plantea problema, ya que tenemos
para dar y tomar. Lo “otro”, alguno sí. No resulta fácil encontrar personal
para, a bote pronto, “endilgarle” tan comprometedor asunto.
Así que se ha decidido que me encargue yo de un grupo. Alguien lo hará
del otro, a buen seguro. Y estoy ansioso por encontrarme ante ellos/as dentro de un rato y ver cuánto han
crecido desde que los vi en traje de fiesta. Tanto si son los unos como si son
los otros, yo seré para ellos el mismo, pero ellos para mí con toda seguridad
no.
¿Conseguiré tener el pulso para tratar como “mayores” a quienes conocí
de “muy pequeños”?
El hecho de que bautizara a
muchos de ellos no me lo facilita. Y esa es mi preocupación.
Preocupación por otra parte saludablemente halagüeña.
Como dice tu reloj aquí a la derecha, "tempus fugit y, así, te vas a encontrar con esos seres que nos lo ponen de manifiesto nos guste más o menos, querámoslo o no.
ResponderEliminarBesos
(por cierto, ponle una h a tu preocupación y palabra final del escrito de hoy)
Más besos
El reloj corre, en este caso, más deprisa para ellos que para mí, aunque yo tenga la sensación de que el tiempo vuela y a ellos les parezca que está en pausa. Cosas de la vida.
ResponderEliminarNo ha habido sorpresas; los he reconocido a la primera, porque son habituales, y un auténtico "encanto". Ellas unas mujerotas y ellos tan enanos, y tienen doce años. Es el grupo que me han dejado.
La hache en cuestión ha volado por causa del soft libre, que es poco de fiar. Con el cambio de sistema y los precios de mercado, estoy probando, probando, probando…
Besos a toda prueba. Son de fiar.