En mi ignorancia sólo conocía el kilómetro cero de Sol, en
Madrid, origen –eso me dijeron- de todas las carreteras del país.
Estos días, de turismo vacacional por tierras andaluzas, he descubierto
que hay más.
No hay un sólo principio, sino infinidad de ellos. Por ejemplo, éste,
muy cerquita de Zahara de los Atunes, para quien desee ir a comprobarlo.
Todos los caminos conducirán, o no, a Roma. Cualquier camino en
cualquier parte de la tierra puede empezarse desde el principio, desde cero.
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