Amazing Grace




Agradezco a Juan Masiá, S.J., murciano de origen y japonés de corazón, que en este día, 8 de diciembre, La Inmaculada para los católicos, me haya sugerido en su blog “Viviry pensar en la frontera”, la audición y meditación de este canto que, no por haberlo escuchado tantas veces lo tenía asumido.
Lo ofrezco a la concurrencia, con el añadido de datos biográficos sobre su autor, texto original y traducción aproximada, y la interpretación, elegida al azar, de Il Divo (1).

"Amazing Grace" (conocido en algunas regiones hispanohablantes como "Sublime gracia") es un himno cristiano escrito por el clérigo y poeta inglés John Newton (1725-1807) y publicado en 1779. La composición, una de las canciones más conocidas en los países de habla inglesa, transmite el mensaje cristiano de que el perdón y la redención es posible a pesar de los pecados cometidos por el ser humano y de que el alma puede salvarse de la desesperación mediante la Gracia de Dios.
Newton escribió la letra a partir de su experiencia personal. Educado sin ninguna convicción religiosa, a lo largo de su juventud vivió varias coincidencias y giros inesperados, muchos de ellos provocados por su recalcitrante insubordinación. Fue forzado a unirse a la Royal Navy y, como marinero, participó en el mercado de esclavos. Durante una noche, una tormenta golpeó tan fuertemente su embarcación que, aterrorizado, imploró la ayuda de Dios, un momento que marca el comienzo de su conversión espiritual. Su carrera como tratante de esclavos duró algunos años más, hasta que abandonó la marina para estudiar teología.
Ordenado sacerdote de la Iglesia de Inglaterra en 1764, Newton fue nombrado párroco de Olney (Buckinghamshire), donde comenzó a componer himnos junto al poeta William Cowper. "Amazing Grace" fue escrito para ilustrar un sermón en el día de Año Nuevo de 1773. No se sabe si había música para acompañar los versos, puesto que pudo ser recitado por los feligreses sin melodía. Fue impreso por primera vez en 1779 dentro de la colección de Himnos de Olney de Newton y Cowper. A pesar de ser relativamente desconocido en Inglaterra, "Amazing Grace" fue usado extensamente durante el Segundo Gran Despertar en Estados Unidos a comienzos del siglo XIX. La letra ha sido adaptada a más de veinte melodías, si bien la más conocida y frecuente en la actualidad es la llamada "New Britain", que fue unida al poema en 1835.
El autor Gilbert Chase ha escrito que "Amazing Grace" es «sin lugar a dudas, el más famoso de todos los himnos populares», mientras que Jonathan Aitken, biógrafo de Newton, estima en su obra que el himno es cantado cerca de diez millones de veces cada año. Ha tenido una particular influencia en la música folk y es un cántico emblemático de los espirituales americanos. "Amazing Grace" contempló un resurgir de su popularidad en los Estados Unidos durante la década de 1960 y desde entonces ha sido interpretado miles de veces, siendo un clásico de los cancioneros populares dentro de los países de habla anglosajona.
(Wikipedia)

Texto original
Amazing Grace, how sweet the sound,
That saved a wretch like me.
I once was lost but now am found,
Was blind, but now I see.

T'was Grace that taught my heart to fear.
And Grace, my fears relieved.
How precious did that Grace appear
The hour I first believed.

Through many dangers, toils and snares
I have already come;
'Tis Grace that brought me safe thus far
and Grace will lead me home.

The Lord has promised good to me.
His word my hope secures.
He will my shield and portion be,
As long as life endures.

Yea, when this flesh and heart shall fail,
And mortal life shall cease,
I shall possess within the veil,
A life of joy and peace.

When we've been here ten thousand years
Bright shining as the sun.
We've no less days to sing God's praise
Than when we've first begun.

Amazing Grace, how sweet the sound,
That saved a wretch like me.
I once was lost but now am found,
Was blind, but now I see.
Texto traducido al castellano
Sublime Gracia, qué dulce Sonido
Que salvó a un desgraciado como yo.
Alguna vez estuve perdido, pero me he encontrado.
Estuve ciego, pero ahora veo. 
Fue La Gracia quien enseñó a mi corazón el temor,
Y La Gracia alivió mis miedos .
Qué preciosa se manifestó La Gracia
En la hora en que empecé a creer.
A través de muchos peligros, trabajos y trampas,
Ya he llegado.
Es La Gracia quien me ha mantenido a salvo hasta ahora,
Y La Gracia me guiará a casa.
El Señor me ha prometido el bien.
Su palabra asegura mi esperanza.
Él será mi escudo y mi porción,
A lo largo de mi vida.
Sí; cuando esta carne y este corazón se consuman,
Y mi vida mortal cese,
Voy a tener dentro del velo
Una vida de alegría y paz. 
Hemos estado aquí diez mil años
Resplandeciendo como el sol.
Nunca hemos tenido menos los días para cantar alabanzas a Dios
Ni siquieera cuando empezamos a hacerlo.
Sublime Gracia, qué dulce Sonido
Que salvó a un desgraciado como yo.
Alguna vez estuve perdido, pero ahora me he encontrado.
Estuve ciego, pero ahora veo.

 


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