Sembrando estrellas

Acabo de enterarme de este lugar y cuando he visto estas fotos no he podido evitar caer en la tentación de "robarlas". Y digo bien, porque están robadas y colocadas en mi almacén particular para que no desaparezcan aunque su autor (o autora) las descuelgue de su sitio. Sólo si me lo pide, las suprimo. Palabra

«Esta peculiar estatua se encuentra en Kaunas, la segunda ciudad más grande de Lituania. La pieza es de bronce y representa un claro ejemplo de la herencia soviética. El nombre de la obra es Sėjikas ("chorlito dorado" en español) y su autor, Bernardo Bučo. Las estrellas pintadas en el muro le han hecho ganarse el apodo de "El Sembrador de Estrellas", aunque con la luz del día no hace demasiada justicia a su nombre.» Esto dice. Y yo no entiendo esto de "chorlito dorado" referido a esta efigie; claro que si lo dice el autor, es otra cosa.

Es al caer el sol cuando la estatua inanimada parece recobrar vida, movimiento y pleno sentido:

En el lugar de donde la tomé se afirma que "Si queréis verla, se encuentra muy cerca del Museo de la Guerra Vytautas (Vytauto Didžiojo karo muziejus) de la ciudad. Según he leído, el objetivo de la estatua no tenía nada que ver con estrellas, sino ser un símbolo histórico. Sin embargo, es curioso ver como el arte de la calle a veces puede hacer maravillas."

Aprovecho que estamos teniendo unas noches poco propicias para contemplar estrellas para ofreceros esta preciosidad de efecto óptico. Y también para invitaros a una reflexión: soñemos, mantengamos ilusiones, no dejemos que nos sorprenda la noche sin haber dejado caer por el camino las semillas que a su debido tiempo germinen y generen vida y nuevos sueños, renovadas ilusiones y viejas pero nada gastadas utopías.

Y como éste tiene mejor verbo que yo, helo aquí; aunque sea de hace tiempo conserva actualidad y sentido. Además es de Cádiz, ¡toma ya!

[¡Qué cosas! La muchacha (mejor digo "la persona", por si la vista me engaña y por si las moscas) del escobón parece mismamente de mi barrio. Pero no, que es de Lituania. Si es que ya no hay ni distancias ni fronteras, ¡qué mundo, dios, qué mundo!]