¿Ayer fue 20 de Noviembre?

Si no me pellizco, creo que aún estoy dormido. Pero no, estoy despierto, hoy es día 21, y ayer ni me acordé que fue 20 de Noviembre.

Empiezo a entrar en la normalidad.

Por eso y porque Portugal está ahí al lado y tuvo su momento de ilusionante alegría, claveles rojos en ristre, quiero que escuchéis "Grándola, Vila Morena".

¡Que tengáis un buen día!



Grândola, vila morena
Terra da fraternidade,
O povo é quem mais ordena
Dentro de ti, ó cidade.
Dentro de ti, ó cidade
O povo é quem mais ordena,
Terra da fraternidade
Grândola, vila morena.
Em cada esquina um amigo
Em cada rosto igualdade,
Grândola, vila morena
Terra da fraternidade.
Terra da fraternidade
Grândola, vila morena
Em cada rosto igualdade
O povo é quem mais ordena.
À sombra duma azinheira
Que já não sabia a idade
Jurei ter por companheira
Grândola a tua vontade
Grândola a tua vontade
Jurei ter por companheira,
À sombra duma azinheira
Que já não sabia a idade.

5 comentarios:

  1. Pues pellízcate más, porque el día 20 el motivo de los blogs ha sido recordar los derechos de los niños, tan olvidados, como todos los derechos, o tan maltratados, como la dignidad de las personas. Y pellízcate, por constatación dolorosa, porque sigue ahí el monumento genocida hecho por los vencidos, acogiendo bajo una losa el cuerpo de su jefe. No sé si hasta aquí llegará la memoria histórica.
    Un abrazo.

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  2. Tienes razón, Juan, nunca me pellizcaría lo suficiente para estar completamente seguro de que estoy despierto; mi consciencia no abarca toda la realidad que me engloba; no soy capaz, -hasta ahora no lo he conseguido-, de estar atento a todos los horizontes, lejanos y cercanos, propios y ajenos, resolubles o imposibles.

    Los niños no necesitan de un día para, sino de todos; son realidad y ojalá también sean futuro.

    El dichoso monumento no me importa. Me da mucho frío.

    Ciertamente hay más asuntos pendientes que días en el calendario, pero para mí hoy es especial porque me olvidé del día de ayer. Y eso ya es bastante.

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  3. Muy buen contrapunto Míguel, qué emoción oír Grandola vila morena, cuántas veces cantada con la emoción en la garganta y el llanto corriendo por las mejillas, adoro esta canción de esperanza, fraternidad, de solidaridad.
    El 20N para mi ya tampoco es nada más que otro día en el calendario, la historia los ha barrido y seguirá barriendo todo el poso poco a poco.

    Bien por ti Míguel, efectivamente hemos entrado en la normalidad.

    Te quiero. Besos

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  4. Me encanta tu sentido del humor.

    En el lenguage de las flores los claveles significan: Amistad, seguridad, pragmatismo.

    Siempre emociona oir de nuevo Grandola, sobre todo si se oye un 20N en lugar del 23 de abril.

    Un abrazo.

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  5. Julia y Laura entra dentro de la más pura normalidad ofreceros un clavel reventón, o sea dos, uno para cada una. Como no sé la manera de insertarlos en un comentario, aunque ya lo he visto hacer en un blog, me comprometo a aprenderlo; pero mientras lo consigo, os mando un beso y un abrazo desde aquí.

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