Mi canario ha vuelto a sus trinos

A mi compa "Pichurri", el canario que ocupa mi cuarto de estar y comparte conmigo ruidos, cantos, voces y suciedad, le han vuelto las ganas de gorjear.

Ha sido esta mañana, hacia las 11:00 horas, tras todo un largo período de mutismo producto del cambio de plumas, que a su edad cada vez se alarga más y más.

Pero si le abandonó el canto, no le faltó nunca la alegría; que hay que ver cómo saltaba en la jaula cada vez que yo entraba y le decía piropos, o cambiaba la música ambiental que siempre, o casi siempre, tengo puesta en mi casa.

Tentado he estado de sacarle aquí, en foto; me he contenido, no obstante, porque él también tiene su intimidad y su derecho de imagen. Y como no me ha dado su permiso, yo chitón.

En su honor, y también en su lugar, pongo este vídeo pachanguero, producto de remezclar fotos y música que bien pudiera servir como acompañamiento a esta hora del día en que todo ser viviente está enfrascado en las labores domésticas.


No es gran cosa, ya lo sé; pero es que no doy pa más, que "esto" es así y sólo así.

Quien canta es Labordeta, y alguien más con él, y la canción, "A callejear".

5 comentarios:

  1. ¿Y si Pichurri estuviera pidiendo salir a callejear? No me extrañaría que se preguntara por el mundo que has visto al regresar.
    Un abrazo.

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  2. MA: te envío un saludo en este re-encuentro con "tu pequeño mundo". La paz de espíritu no es intercambiable por nada. A veces es bueno salir " de casa" para valorar a la vuelta lo que dejamos. Y no se vuelve igual. De todo se aprende. Hay mar para todos. ¡ Buena navegación!
    En el espíritu de la Bienaventuranzas, hoy fiesta de todos los Santos recibe un fraterno y orante abrazo

    margalit

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  3. Hoy no se que poner, no me gustan los pájaros en las jaulas; en el jardín hay muchos, vuelan a su bola no tienen miedo ni a los perros ni a nosotros ni a nadie, les tengo un comedero donde pongo pan duro remojado en agua y ellos vienen a picotear casi mientras les pongo la comida, también les pongo alfalfa en semilla, cañamones, me gusta verles libres cantando y callejeando como dice tu amigo.
    Un beso Laura

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  4. Juan, en realidad no tiene nombre, lo de pichurri me salió así, según escribía aquí.

    Es un canario, nacido en cautividad, fruto de mil cruces para sacarlo con trinos y colorido, un producto más de la manipulación humana sobre la naturaleza.

    Se lo compré para mi madre, cuando empezaba a no estar ya independiente, que serlo lo fue siempre; para que se entretuviera con la comida, limpieza, etc. Al final, mi padre dijo que se lo quitara de la vista y me lo traje. ¿Dónde podría ir el probe, si hasta está cojo?

    Sin embargo, puedes tener razón, que la libertad nunca se olvida, lo llevamos en los genes…

    margalit, como en casa en ningún sitio. En aquel lugar me sentía extraño; además trabaja muy lento y ofrece muy pocas posibilidades de poner reloj, música, chorraditas de estas que parece que no, pero alegran el hogar.
    Gracias por tus deseos, que son muy buenos.

    Laura, qué chupi que diste por fin con la ventanita.
    Yo también disfruto de los pájaros de mi jardín, aunque los muy tunantes cagan en todas partes y se comen MIS UVAS.
    Pero tengo con ellos buena convivencia. Tengo hasta un nido de maricas, que han creado casa entre las ramas del cedro. No veas el ruido que meten cuando graznan, que esos no son trinos, son auténticos berridos.
    Y sigo a la espera de que digas algo en tu huerto, ya estás tardando…

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  5. Yo lo mismo, que no me gustan los pajaricos encerraos, pero también entiendo que estos canarios ya no son silvestres y no sabrían ni buscarse la comida, me parece. Alegran mucho con sus cantos, eso es cierto. A mí me maravillaban los que tenían mis tías, que eran animaleras por su natural y tenían no sólo pájaros, sino toda clase de bichos pululando por la casa. Los canarios eran siempre los que ponían la nota alegre y cantarina.

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