Faltan casi dos horas y ya lo tengo todo listo. Aún no hemos comenzado y
el cansancio me quiere avasallar. No lo consentiré, ¡vive Dios!
¿No te estás adelantando a san
juan?, dice una vecina al verme con la hoguera. Las compañeras
callan y sonríen. Es la única que no lo sabe. Y mira que estar está; incluso a
diario.
Esta noche no se anuncia con trompetas y tambores. Como la de Navidad,
sólo alcanza a quien espera… y no desespera.
La empecé con prisas, porque amenazaba la truena. Agarró con fuerza y en
seguida prendió troncos y ramas.
Ahora está a la espera de recibir los ramos del domingo…
Claro, si la lluvia lo permite.
Con todo y con eso, brasas tendremos para encender el cirio y los
ánimos, que ya están caldeados desde tiempo ha.
¡¡¡Feliz noche de Pascua!!!
¡¡¡Feliz Pascua Florida!!!
Es hora de entrar en la
noche sin miedo,
de atravesar ciudades y
pueblos,
de quemar lo viejo y
comprar vino nuevo,
de quedarse en el
corazón del mundo,
de creer en medio de la
oscuridad y los truenos.
¡Es la hora de la vida
nueva!
Es hora de levantarse
del sueño,
de salir al balcón de
la vida,
de mirar los rincones y
el horizonte,
de asomarse al infinito
aunque nos dé vértigo,
de anunciar, cantar y
proclamar.
¡Es hora de la vida
nueva!
Es hora de romper los
esquemas de siempre,
de escuchar las
palabras del silencio,
de cerrar los ojos para
ver mejor,
de gustar su presencia
callada,
de andar por los
desiertos.
¡Es hora de la vida
nueva!
Es hora de despertar al
alba,
de descubrir su
presencia entre nosotros,
de iniciar caminos
nuevos,
de andar en confianza,
de pasar a la otra
orilla.
¡Es la hora de la vida
nueva!
Es la hora de confesar
la vida,
de hablar poco y vivir
mucho,
de arriesgarlo todo
apostando por Él,
de sentarse a la mesa y
calentar el corazón,
de esperar contra toda
esperanza.
¡Es la hora de la vida
nueva!
¡Es Pascua, el paso de
Dios por nuestro mundo
lavando las heridas,
sembrando esperanza,
levantando la vida,
llenando de semillas
nuestras alforjas vacías!
(Florentino Ulibarri)
Lo permitió, faltaría más. Ya son suyas…
Ahora a ver si seguimos teniendo suerte y podemos con el pica-pica de
después. ¡Hay que celebrarlo!
Lo dicho, que ustedes tengan una muy feliz Pascua de Resurrección.
Feliz Pascua de Resurrección también para ti, Míguel.
ResponderEliminarBesos