Esperando el cambio de guardia



Malamente comenzó el otoño climatológico. El astronómico lo hizo sin pena ni gloria. Pero las primeras lluvias, junto con otras circunstancias que no merecen explicitarse, dieron lugar a un día gris, tirando a negro.
Eso y meterme en el cuerpo tres celebraciones por la tarde en un sábado, sabiendo que a la mañana siguiente llegan otras dos, y que tres de ellas son en residencias para personas mayores, más que animar, asusta.
Pero pasada la tormenta, y con el sol brillando al caer el día, parece que todo recobra su sentido.
Hoy, además, una visita sorpresiva a esta entrada mía de hace años, y el tema del rico Epulón y el pobre Lázaro como centro de la liturgia, parece que me han devuelto la luz, o a la luz.
Resulta que ahora es noticia de portada que la Iglesia ha de ser pobre y para los pobres. Y salvo quienes han estado siempre en el asunto y lo tienen claro dígase lo que se diga, por aquí y por allá se está a la espera de ver cómo se concreta, en qué se materializa, o si va a resultar que al final sólo va a consistir en poner simplemente un pobre a la puerta, como en aquella vieja película española de los años cincuenta.
Que a los pobres hay que dedicarles atención, siquiera un poco, nadie lo discute, al menos abiertamente. Que constituyan el centro de todo, o que sean ellos los que estén a la cabeza, eso es harina de otro costal.
O estoy muy equivocado o este tema va a levantar más sarpullidos que lo del asunto del sexo mandamiento. Y si no, al tiempo.

Cambio de guardia en el Vaticano

Esta caricatura hecha con lápiz representa al rey Víctor Manuel II de Italia y Napoleón III como soldados cambiando la guardia, mientras que el Papa Pío IX mira con ojos escrutadores desde la esquina. La caricatura se refiere a las intrincadas maniobras que tuvieron lugar a mediados del siglo XIX entre Francia, Austria, los Estados Pontificios y los nacionalistas italianos, y que precedieron a la unificación de Italia. Las tropas francesas y austríacas habían estado en Roma para proteger los Estados Pontificios desde 1850, cuando Pío IX comenzó a temer el levantamiento de los nacionalistas anti-papales. En 1858, los sardos firmaron un acuerdo con Napoleón III para luchar contra Austria por las regiones de Lombardía y Venetia. Esta fue una de las primeras guerras de unificación italiana. El dibujo es muy probablemente de principios de 1858, antes de que Napoleón III firmara un acuerdo por separado con el rey de Austria que sorteaba a Víctor Manuel. La caricatura, que se publicó en Punch el 8 de octubre de 1864, está firmada y fechada por John Tenniel (1820-1914), un ilustrador británico. Tenniel fue reconocido como un talentoso caricaturista político, pero es más conocido por sus ilustraciones para el original de Alicia en el país de las maravillas. Este trabajo pertenece a la Colección Militar de Anne S.K. Brown de la Biblioteca de la Universidad Brown, la principal colección estadounidense dedicada a la historia y a la iconografía de los soldados y sus actividades, y una de las colecciones más grandes del mundo dedicada al estudio de los uniformes militares y navales.

3 comentarios:

  1. "Resulta que ahora es noticia de portada que la Iglesia ha de ser pobre y para los pobres"

    ¿Por qué será?, quizá porque la ICAR lleva tantos años siendo un negocio al servicio de los poderosos y de la propia jerarquía que cuando el papa Francisco habla y predica la vuelta a los orígenes hay una especie de conmoción y no nos lo acabamos de creer y tenemos el mismo temor que tú apuntas: ponga un pobre a su mesa en navidad y listo. Si así fuera vaya fiasco ¿no?. Juan XXIII fue otra bocanada de aire fresco pero se acabó demasiado pronto y el negocio recomenzó.

    Y Rouco Varela sigue sin dimitir, igualito igualito que el mister Rajoy de las narices, ellos son nefastos y perjudiciales para esta sociedad pero les da igual porque están al servicio de los poderosos y ellos les quieren ahí y los han elegido por algo: sin dignidad ni honestidad, ni ética ni vergüenza, a las personas es fácil manejarlas, así son ellos y por eso están ahí y se aferran al cargo como piojos.

    Volví a la entrada de 2008 y vi el vídeo de Eloy y no me extraña que le amaras, era un ser amoroso y "amable" (digno de ser amado), fue un gran ser humano. Al fin y al cabo eso es lo que importa aunque los mediocres no se enteran.

    Besos, amigo mío.


    (habrás notado que ya he aprendido a usar el HTML)

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  2. Julia ya se ha adelantado.Solo una opinión particular

    Me creería muchas cosas de las que dice Francisco, sino fuera Papa.
    Algunas veces lo intuyo -a Francisco- como el agua que sutilmente se va metiendo poco a poco por las rendijas de un destruido y resquebrajado templo, para limpiar de residuos mohosos que han crecido con el paso del tiempo, del abandono, de la desidia. El agua tiene que andarse con cuidado porque si se "enteran" que alguien quiere limpiar cerrarán la espita del grifo y se acabó la limpieza.

    Hay atisbos de cambio ¿hasta dónde?, nadie lo sabe.

    Lo de Eloy una joya, el,su vida y su obra .

    Un abrazo

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  3. ¡Hola! a ambas. No importa quién haya sido la primera, os quiero por el orden que sea, tanto como puedo. Hay cosas que puedo poco, y cosas que puedo mucho. A vosotras dos muchísimo.

    Eloy fue un santo varón, y como todo lo bueno, se acabó demasiado pronto.

    ¿Ves, Julia como sabes hacer las cosas? Lo mismo que Laura, que por fin pudo recuperar su cuenta y su blog.

    Aunque lo haya titulado "cambio de guardia", en realidad no hay relevo, es sólo apariencia. Esto es poner en primer lugar lo que estaba algo atrás, pero estaba, claro que estaba. No faltarán, sin embargo, quienes a pesar de todo, lo tapen o lo vistan de lagarterana.

    Besos a las dos

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