R
Parece una bobada,
pero, qué casualidad, sólo hay cuatro meses en el año que carecen de esa
consonante tan sonora. Y es justamente septiembre, que hoy comienza, el mes que
encabeza la lista de los ocho restantes meses, que la llevan. No parece tener
ninguna importancia, salvo para estar atentos a que, según el antiguo dicho, el
sol puede resultar dañino si se toma descuidadamente. Ojito, pues, con el sol
de membrillo.
Es curiosa esta
letra, la r. ¡Mira que necesita reforzarse para que suene como debe en
determinadas circunstancias! No empatizo, y bien que lo siento, con quien la
pronuncia suavemente, al estilo francés. Yo, por el contrario, la hago sonora,
rotunda. Y eso produce en quien no me frecuenta como un cierto espanto. ¡Ya está
enfadado! suelen comentar. Y no es verdad. Sólo pronuncio la r con fuerza.
Comprendo que esto va
en sensibilidades, que entrar dando voces atemoriza a quien habla quedamente,
que hablar alto no se estila en Europa, y que un hablar suavecito es mucho más
seductor, mucho más. Pero si yo me expresara así, podrían pensar quienes me
conocen que estoy enfermando o que he perdido el interés. Y no.
Pero vuelvo a la r,
la letra. Mejor dicho, vuelve Rosa Díaz [1] con esta poesía:
La
Erre no llora
porque no esté en risa
ni en rosa ni en Roma.
Ella no porfía
pero no se baña
con el agua fría.
No quiere rezar
y si no es mejor
nunca es regular.
Tampoco se enfada
porque no la metan
en ninguna cara.
Y es que siempre va
con las herramientas
de aquí para allá.
No es dura y es hierro,
le asustan los grillos,
le gustan los perros.
Se mete en la barra
y aunque no es hermosa
tiene mucha garra.
Ella corre y corre
se monta en el carro
se sale de pobre.
No para, se forra,
no tiene sombrero
pero tiene gorra.
Tampoco es racista
ni está en la maleta
del malabarista.
Bebe en una jarra
y aunque nunca trepa
se sube a la parra.
No estará en la era,
pero sí en la Orden
de la Jarretera.
Barre, borra, ¡Hurra!
Ella erre que erre.
Ella, se lo curra.
porque no esté en risa
ni en rosa ni en Roma.
Ella no porfía
pero no se baña
con el agua fría.
No quiere rezar
y si no es mejor
nunca es regular.
Tampoco se enfada
porque no la metan
en ninguna cara.
Y es que siempre va
con las herramientas
de aquí para allá.
No es dura y es hierro,
le asustan los grillos,
le gustan los perros.
Se mete en la barra
y aunque no es hermosa
tiene mucha garra.
Ella corre y corre
se monta en el carro
se sale de pobre.
No para, se forra,
no tiene sombrero
pero tiene gorra.
Tampoco es racista
ni está en la maleta
del malabarista.
Bebe en una jarra
y aunque nunca trepa
se sube a la parra.
No estará en la era,
pero sí en la Orden
de la Jarretera.
Barre, borra, ¡Hurra!
Ella erre que erre.
Ella, se lo curra.
Y ahora soy yo el que desvaría con
la letra r, y copio tal cual me las encuentro en Internet las siguientes
frases, que tendrán sentido sólo si se leen desinteresadamente, sin pretender
buscarles un mensaje oculto:
Y termina esta fechoría a costa de
la r, esa letra que tanto va sola como duplicada, con una pequeña broma, que
puede servir tanto para un roto como para hacer ejercicio de pararrotación [2]:
Versitos
para practicar la "rr"
En las salas de 4 y 5, a veces encontramos que algunos de nuestros chicos todavía no pronuncian correctamente la letra "r", ya sea simple o doble. En esta sección agregamos unos pequeños versos, para que puedan practicar de forma amena la dicción de esta letra.
El otro día me caí
del ferrocarril
al lado de un barril.
El barril tenía ruedas
¡Qué raro barril!
Y con las ruedas
caí en el barro marrón!
Fui a mi casa, me bañé rápido
y dije todo otra vez .(Gracias, Nicoleta!)Erre con erre, guitarra,
erre con erre, barril.
¡Mira que rápido ruedan
las ruedas redondas
del ferrocarril!(Gracias, Natalia!)Por la calle de Carretas
pasaba un perrito;
pasó una carreta y
le pisó el rabito.
¡Pobre perrito,
cómo lloraba
por su rabito!El burrito barrigón
ayer se dio un resbalón.
Por andar detrás de un carro
se cayó dentro del barro.
¡Qué burrito picarón,
el burrito barrigón!Corre que te corre,
corre sin parar.
Corre, corre, corre,
que si tú no corres
¡seguro te atraparán!(¡Laura Vicente nos envió la 2da parte!:)Corre, corre y corre,
corre más rápido que te pilla,
corre y más corre
que si no el rabito atrapará
y si no el perrito aullará,
y el ratón borracho se quedará,
corre, corre y corre.(Gracias, Laura!)Borracho un ratón robó
un ramo de rosas rojas.
El rabo se le enredó
y rodó de rosa en rosa.
(Gracias, Oliver Snow, de Toronto- Canadá (7 años)!)El ratónEl ratón se come un bombón.
Se viene un gato marrón a comer el ratón.
Pero el bombón reventó, ¡BOM!
1 Rosa Díaz (Sevilla,
1946) es una escritora que ha recorrido con su obra una importante trayectoria
poética. Aparte de su faceta de articulista (colabora habitualmente en ABC
de Sevilla) y de autora de biografías (ha publicado recientemente la
biografía de Alejandro Rojas Marcos y colabora actualmente en la elaboración
del Diccionario Biográfico Español patrocinado por la Real Academia de
la Historia), como poeta ha recibido importantes galardones literarios (Miguel
Hernández, Ciudad de Alcalá de Henares, Fray Luis de León, Fray Bernardino de
Sahagún, Ciudad de Jaén etc.) y su obra está recogida en algunas antologías
poéticas españolas y europeas. También ha colaborado con poemas en importantes
revistas especializadas (Zurgai, Ánfora nueva, Casa de las Américas, El
siglo XXI etc). Tampoco podemos olvidar su poesía para niños, que publica
habitualmente en Hiperión. Han escrito y hablado sobre ella especialistas y
escritores como Rogelio Reyes Cano, Julia Uceda, Antonio Rodríguez Almodóvar,
Elena Barroso, José Hierro, Rafael Montesinos, Antonio Hernández etc.
2 El jardin online es una
gozada de blog que te hace disfrutar si lo visitas.
Hola Miguel Angel
ResponderEliminarSegún dicen los entendidos, los meses del año que tienen R son los meses en los que se puede comer un buen marisco.
Así que de septiembre a abril, para el bolsillo que se lo permita y a quíen le guste,el marisco está a punto.
¡hay que ver la de cosas que has sacado de la R, amigo!
No sabía lo del marisco; espera a ver que me miro el bolsilo por ver si me llega para ello. Claro que marisco es tanto una cigala como un mejillón. Seguro que tendré para algo.
ResponderEliminarY todo esto y mucho más está en la red, que da de sí lo que tú quieras.
Ojito ahora en tu tierra con la gota fría, que también tiene erre.
Un saludo, Sir Enry
Bueno, ya me ha vuelto a pasar lo de las letritas de una en una en vertical con los versitos de la erre, así no hay manera, Míguel. Vaya rebote, hasta se me ha olvidado la letra erre, mira tú.
ResponderEliminarBesos
Ya lo siento, Julia; es por la anchura del blog, que se sale de la norma. Pero como eres chica lista, volverás a recuperar la erre, estoy completamente seguro.
ResponderEliminarBesos.
¡¡¡¡La he recuperado!!!!!, ya puedo leerlo todo como dios manda. Gracias por tu confianza en mis dotes, la verdad es que, a veces, acierto por casualidad.
ResponderEliminarBesos
¡La erre es muy importante, vaya que sí!
La casualidad acompañó a Fleming, y a los esposos Curie, y a Edison… si no nunca hubieran conseguido acertar a la ¿enésima vez?
ResponderEliminarTengo un problema, no sé cómo son los besos con erre, pero seguro que los hay. Pues uno de esos para ti.
Lo de las "R" no se refiere al marisco , es a las sardinas, que precisamente están más ricas los meses que no tienen R.
ResponderEliminar