En realidad no dijo
eso, sino esto otro:
Jeg, Andreas, jeg modtager dig, Inés, hustru, og jeg overgiver til dig og lover at være tro i gode tider og i dårlige (i velstand og i modgang) i sundhed og sygdom, og så kærlig og ære dig alle dage i mit liv.
Porque Andreas es danés, e Inés se lo quiso escuchar en su propio idioma.
Así que el novio nos soltó esa parrafada que, para que lo entendamos, en
español es así:
Yo, Andreas, te recibo a ti, Inés, como esposa y me
entrego a ti y prometo serte fiel en las alegrías y en las penas (en la
prosperidad y en la adversidad), en la salud y en la enfermedad, y así amarte y
respetarte todos los días de mi vida.
De modo que la
ceremonia bailó de uno a otro idioma, para que nadie entendiéramos nada, o
casi, pero lo comprendiéramos todo.
En lo que sí
coincidimos fue en el estar y en el escuchar. Fue, ¡cómo no!, la música el
vehículo universal de comunicación. Sintonizamos todos los presentes.
Este fue el
repertorio completo, para quien tenga la paciencia de escucharlo. Y para quien
no, aquí está el índice:
1. Gloria de El Mesías, de Händel
2. Laudate Dominum, de Händel
3. Ave María, de Javier Busto
4. Heilig, Heilig, Heilig, de Schubert
5. Alleluia, de Mozart
6. Dona nobis pacem, de Mozart
7. Ave Verum Corpus, de Mozart
8. Hallelujah de El Mesías, de Händel
9. Te quiero, letra de Mario Benedetti, música de Alberto Favero
Y para que conste en acta, la fe
también nos unió, unidad en la diferencia: católicos y luteranos juntos y a
pesar de todo también revueltos. Aquí, como en otras cosas, el algodón no
engaña.
Impresionante fue el final, tras la firma de los documentos pertinentes; los nuevos esposos rodeados de testigos y familiares recibieron un sentido homenaje con el canto final. Hasta el novio se emocionó. Del padrino, o sea el padre de la novia, mejor no hablamos. Es que Benedetti es mucho.
¿También les tocó llantina con el poema de Benedetti?, no me extraña, estremece hasta el tuétano y emociona hasta las lágrimas, a mi todo eso y más. Enhorabuena a los novios y que sea por muchos años y en buena armonía. Y a ti besos.
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