Fue lo primero que escuché ayer en la radio cuando me
desperté. A continuación el altavoz fue desgranado números y datos sobre la
situación de la población mundial al respective. Nada nuevo cuando el hambre
agobia a una porción significativa de la humanidad y la guerra continúa a las
claras con todos los beneplácitos de las jerarquías planetarias.
En mi ciudad estábamos de fiestas, así
que el silencio en la calle era sepulcral. Todos dormían. El paseo matutino fue
tranquilo, y más tarde la piscina estaba apenas ocupada. La tarde no supuso
otra cosa, hasta que se me ocurrió acercarme a la ciudad, era la salida de los
toros. El Paseo de Zorrilla era una multitud que desbordaba las aceras y
ocupaba parte de la calzada. Gracias a los municipales vehículos a motor y a
pedales pudimos continuar nuestro camino. Me di cuenta de que había automóviles
de gama altísima en mayor proporción de lo que es normal en mi ciudad. De
seguro que hubo gente de tronío en el coso.
Atendí a mis obligaciones en el centro
y volví despacio, dándole a los pedales lentamente, mirando a los paseantes al
caer de la tarde. Disfrutaban de helados y golosinas, con una temperatura
veraniega.
Por la mañana debió salir una
procesión, desde su iglesia llevaron a la patrona a la seo para devolverla
luego de nuevo a su lugar; pero nada oí, nada me contaron, tampoco estuve.
Termina el día y no quiero preguntarme
para no parecerme a Mafalda si ya la guerra terminó, si el hambre fue eliminada
de la faz de la tierra y si todo el mundo ha superado su analfabetismo. Si las
dos primeras continúan, la tercera no hay ninguna duda de que también.
Me voy a la cama, que no tengo ganas
de pensar. Voy a coger cualquier libro y a esperar que me llegue el sueño.
Mañana tal vez las cosas empiecen a ser diferentes.
Esta tarde leía que las mujeres representan el 75% del analfabetismo en España. ¿No demuestra Mafalda la injusticia empecinada el sistema?
ResponderEliminarTotalmente,Juan. Hambre tampoco pasa, ¿no? No le ponen sopa todos los días. Y de guerras… las que mantiene con Manolito.
ResponderEliminarQue alguien atienda a Mafalda. Que alguien le diga a su agresor que precisamente él es quien más necesita de su ayuda.
ResponderEliminarViva Mafalda y larga vida a Quino.
Saludos.
Hay muchos Manoli`Thos en el mundo, y no me refiero al torpe y bruto de Quino, me refiero a otros que mantienen a las masas en la mas absoluta ignorancia para ser utilizadas como manos de obra barata.
ResponderEliminarUna cosa que me gusto mucho, del Nicaragua que conocí, es que hasta los niños limpiabotas recitaban poesías preciosas de Cortazar o de Omar Cabezas, en esa época estaban obligados a ir a la escuela y por la tarde podían estar en la plaza limpiado botas por unas pocas monedas, los que me encontré sabían leer y escribir muy bien; de aquello a lo que hay ahora , no queda nada.
Besos