¡Penitenciágite!

 
Qué curioso, no lo he podido encontrar por ningún sitio. Yo creía que estaba en boca de todo el mundo, pero parece que no.
Ella sí lo suele decir con mucha frecuencia: “Desengáñate, Miguel Ángel, toda obra buena tiene su penitencia”. Y pasa a continuación a relatar experiencias propias de favores hechos a personas de todo tipo y circunstancia, que, por azar o por calculada intención, se convirtieron en disfavores para el sujeto agente. Lo que ya no me explica es si era el sujeto paciente el que lo provocaba, o constituía una más de las circunstancias ocurrentes.
Aún así, Pilar, que así se llama esta persona de la que estoy hablando, no ha dejado nunca de solidarizarse con quien tenga ocasión, pretexto y contexto. Porque el resultado final no parece que le motive; ella sólo parece que se preocupara del momento en sí, de la necesidad concreta y apremiante, del ser humano que ante sí tenga en el instante preciso.
Por mi experiencia poco puedo aportar. No digo que haya que tirar cohetes; pero tampoco me ha ido tan mal. No me ha sobrevenido ningún cataclismo cósmico por haber atendido a nadie; tampoco me han colgado medallas; al menos estoy tal como estaba. Si acaso una pequeña alegría en tanto ejecutaba, como si fuera consciente de que entonces estaba portándome a pré, como si con ello redimiera por las veces que no fui capaz de atender…
Cuando por los motivos que sean alguien va y me dice “te acuerdas de cuando yo…”, intento hacer memoria y no hay manera. Ya sólo me digo “¿cuándo hice yo tal cosa?”, y no consigo recordar.
Tendrá razón Pilar, y toda penitencia, o al menos alguna, tenga su origen gestor en cierta o incierta obra pretendidamente buena. Pero yo al menos no podría convertir esta frase en principio y fundamento de un modo de vivir y de portarse.
Tampoco concluiría, por ejemplo, con esta otra frase aunque resultare muy dúctil para el tema: “Haz el bien y no mires a quien”.
¡Que ya sería el mismo colmo tener que decir cuando llega esa ocasión: “¡Virgencita, Virgencita, que me quede como estoy!”

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