Después de lo que ha escrito Arobos, poco tengo yo que añadir, a pesar de que tenía el asunto apartado para el final, como el más interesante de los cinco. Él titula "Manos que dan vida" a su contribución en el concurso que organiza maríajesús paradela. Yo no participo, en el concurso digo, pero sí estoy invitado a reflexionar desde mí por las imágenes que la gallega dejó como provocación y propuesta.
Para mí las manos es lo mejor que tenemos los humanos. No hay miembro de nuestro cuerpo que se les pueda comparar. Y mira que somos completos y estamos dotados de cualidades. Pero es en las manos donde yo considero que se encuentran de manera ilimitada nuestra capacidad de expresión, de comunicación, de sensibilidad, de fraternidad, de creación. Desde las manos que nos reciben cuando nacemos, hasta las manos que nos cerrarán los ojos cuando muramos, todo, absolutamente todo, está amasado por las manos. Incluso en el caso de que nos faltaran, supliríamos como fuere el miembro ausente, para hacer lo que las manos hacen, porque de lo contrario esta vida no sería vida.
Para mí las manos es lo mejor que tenemos los humanos. No hay miembro de nuestro cuerpo que se les pueda comparar. Y mira que somos completos y estamos dotados de cualidades. Pero es en las manos donde yo considero que se encuentran de manera ilimitada nuestra capacidad de expresión, de comunicación, de sensibilidad, de fraternidad, de creación. Desde las manos que nos reciben cuando nacemos, hasta las manos que nos cerrarán los ojos cuando muramos, todo, absolutamente todo, está amasado por las manos. Incluso en el caso de que nos faltaran, supliríamos como fuere el miembro ausente, para hacer lo que las manos hacen, porque de lo contrario esta vida no sería vida.
Algo tan simple a primera vista como capar una tomatera, sin embargo encierra en sí todo un largo proceso de aprendizaje. Pero también una maravilla de instrumento, formado por huesos, tendones, articulaciones y músculos que no ha encontrado aún rival. Ni lo encontrarán.
En las manos está todo dicho de una persona. Si trabaja o estudia. Su edad. Su condición. Su ternura. Su afabilidad. Su energía. Su corazón. Si da o recibe. Si acoge o despide. Si sirve o no sirve.
Puestos a enumerar usos y posibilidades de las manos, saldría una lista demasiado larga para un blog. No obstante me atrevo a iniciarla.
Las manos pueden servir para…
Abrazar,
Acariciar,
Acercar,
Acoger,
Adornar,
Aflojar,
Agasajar
Agraciar,
Amasar,
Aplacar,
Aplaudir,
Apoyar,
Aproximar,
Asir,
Atusar,
Ayudar,
Calmar,
Casar,
Confortar,
Congraciar,
Consagrar,
Construir,
Embellecer,
Enarbolar,
Engalanar,
Ensamblar,
Estrechar,
Firmar,
Fortalecer,
Gestionar,
Gratificar,
Hacer,
Indicar,
Llamar,
Moldear,
Ordenar,
Organizar,
Orientar,
Ornar,
Palmear,
Plantar,
Recoger,
Reconfortar,
Reforzar,
Reunir,
Sanar,
Sembrar
Sostener,
Suavizar,
Tensar,
Unir…
Lo malo de las manos es que también tienen doble uso. Por eso hay que calificarlas, ponerlas un añadido que las determine y no permita confusión. De ahí lo de
mano derecha,
mano izquierda,
manos abiertas
manos amigas,
manos amigas,
manos blancas,
manos cansadas,
manos dormidas,
manos entrelazadas,
manos entumecidas,
manos frías,
manos grandes,
manos hinchadas,
manos inquietas,
manos juntas,
manos libres,
manos limpias,
manos llenas,
manos milagrosas,
manos ocupadas,
manos orantes,
manos perfectas,
manos rápidas,
manos sanadoras,
manos sucias,
manos tendidas,
manos unidas,
manos vacías…
Si es gratificante conocer qué y cuánto pueden hacer las manos, es deplorable, deprimente y hasta escandaloso enterarse de lo que pueden deshacer, o mal hacer. No bastaría con cambiar el calificativo añadido anteriormente por su contrario; no sería suficiente; habría que alargar un poco más la frase, indicando el modo de la acción, su intención, su sujeto paciente, incluso el momento y la circunstancia.
Esas manos que nos hacen y con las que hacemos, pueden ser alternativa o simultáneamente destructoras. Y no es que una mano pueda desconocer lo que hace la otra; las dos, de una en una o ambas juntas, sirven para lo uno y para lo otro.
Quiero sin embargo esta noche ser optimista. Y puesto que mariajesús paradela nos ha fotocopiado sus manos laboriosas, yo propongo como manos ejemplares estas que tengo en mi iglesia para recibir y acoger desde el primer momento a los recién nacidos y a cuantos quieran renacer y estén decididos a ello.
Esas manos que nos hacen y con las que hacemos, pueden ser alternativa o simultáneamente destructoras. Y no es que una mano pueda desconocer lo que hace la otra; las dos, de una en una o ambas juntas, sirven para lo uno y para lo otro.
Quiero sin embargo esta noche ser optimista. Y puesto que mariajesús paradela nos ha fotocopiado sus manos laboriosas, yo propongo como manos ejemplares estas que tengo en mi iglesia para recibir y acoger desde el primer momento a los recién nacidos y a cuantos quieran renacer y estén decididos a ello.
Julia Ardón tiene una página web muy superior, que podéis visitar y disfrutar. Y esa página web tiene entre otros un apartado que se titula Lazos.Jessica Isla dijo el 5 de octubre de 2009
A mi hermano Leo
Unas manos no son más que unas manos, pienso.
Las que tengo enfrente: heridas, astilladas, vueltas pedazos. Unas manos con dedos imperfectos, quebrados por otras manos llenas de odio. Unas manos que sostuve entre las mías de hermana grande, desde la cuna para que fueran creciendo, poco a poco, para que moldearan su propia vida. Unas manos que defendí para que pudieran crecer sanas, sin moretes, ni golpes, para poder acariciar y abrazar la vida, para estudiar, tomar notas y escribir. Unas manos para dibujar y sanar. Unas manos para reír.
Ese mismo par de manos se defendieron sorprendidas, mientras caminaban alegres a la par del cuerpo que las acompaña hacia la casa de un amigo. Solo pudieron formar un muro frente a los golpes y las patadas de veinte policías. Dos manos, contra cuarenta extremidades de furia. Esas manos sólo pudieron quebrarse por la violencia sin sentido, por la violencia que se cree en el derecho de la razón. Unas manos que ahora son yeso y están inmóviles, que nunca quedarán igual, que tendrán que recorrer un camino largo de ida y vuelta para curarse. Unas manos que son la cara angustiada de mi madre y su pregunta ¿cómo te voy a dejar así? Unas manos que son mi rabia y mi impotencia. Un dolor que explota en cada parte de mi cuerpo y que se abre paso en mis entrañas. Sale, se retuerce, parpadea.
Pienso porque me duele tanto, y me imagino que haría yo sin mis manos. Sin los dedos que teclean estas notas, sin mi herramienta de vida, sin mi voz. Sin todas esas manos que me sostienen: Las manos de mi compañero y mi hija sobre mis manos consolándome, las de Manitos Negras sobre mi espalda blanca, doliente, haciéndome llorar, las de la Margarita que desde la computadora traducía a las otras mis mensajes de auxilio y apoyo mientras sufría su propio dolor, su propia pérdida. Las manos de la hermana con nombre de abeja que cada día se aseguraba de que estuviera bien. Las manos que sostienen la manta de la solidaridad infinita de El Salvador, de Costa Rica, México, Cuba, Argentina y Guatemala. Las de mis hermanas escritoras y la red de araña paciente que han tejido mis hermanas y hermanos hondureños desde esta resistencia. Las manos de mis ancestros, ancianas, brujas y guías espirituales. Las manos de Obatalá y Oshún.
Esas manos quebradas son las manos de la resistencia. Apaleada, quebrada, pero firme. Unas manos dignas que gritan un mensaje al mundo que no escucha por ahora. Que cuidan y acogen, que acunan, se acurrucan, cocinan, se levantan y abrazan. Unas manos que con paciencia, tiempo y ternura volverán a curarse y a crear. Que no volverán a ser las mismas. Que crecerán de otra forma, que sanarán más o menos, que se extenderán al mundo. Que en sí mismas forman una voz. Que son miles de manos y una sola.
Unas manos son todas las manos…
Pese a nuestros planteamientos diferentes, todos los caminos llegan a Roma, en mi caso sustituyamos esa bella ciudad por CORAZON, cuando existe buena voluntad. Es curioso, pero hace poco comentaba lo importante que son las manos para como medio de expresión. Ahora leo tu entrada y no puedo sino estar de acuerdo, aunque mi estilo sea seco, irónico y prosaíco. Un abrazo.
ResponderEliminarPor si la letra de la canción que acompaña no se entendiera bien, la pego aquí:
ResponderEliminarLas manos de mi madre
parecen pajaros en el aire
historias de cocina
entre sus alas heridas
de hambre.
Las manos de mi madre
saben que ocurre
por las mañanas
cuando amasa la vida
hornos de barro
pan de esperanza.
Coro
Las manos de mi madre
llegan al patio desde temprano
todo se vuelve fiesta
cuando ellas vuelan
junto a otros pajaros
junto a los pajaros
que aman la vida
y la construyen con los trabajos
arde la leña, harina y barro
lo cotidiano
se vuelve magico.
Las manos de mi madre
me representan un cielo abierto
y un recuerdo añorado
trapos calientes en los inviernos
Ellas se brindan calidas
nobles, sinceras, limpias de todo
¿como seran las manos
del que las mueve
gracias al odio?
Has usado las fotografías como nadie. Tus manos me han columpiado y mecido durante todo el concurso.
ResponderEliminarAna belén cantaba aquel poema de "la muralla", manos que sirven para derribar muros.
Hermoso relato de resistencia de los pueblos hispanos oprimidos. Ojalá esa etapa estuviera pasada ya, pero aun queda un largo camino que Laura fué recorriendo hace ya muchos años.
Las manos... Se podría hablar y decir tantas cosas de ellas... pero tu ya lo has hecho magistralmente. Para mí, a parte de todo lo que tú has enumerado, también son mis pies, pues gracias a ellas andé con bastones y ahora son las que me siguen permitiendo moverme. Como ves, yo amo a mis manos por sobre todas las partes de mi cuerpo, pues sin ellas no sería nadie. Bueno, supongo que sí seguiría siendo yo, pero sin lugar a dudas sería una persona más triste.
ResponderEliminarUn abrazo de corazón a corazón,
y muchas gracias por el comentario tan bonito que me dejaste. Para mí, lo mejor de todo es el poder servir de ayuda a otras personas, con tan solo esto ya me doy por satisfecha de estar aquí en esta maravillosa y bendita Tierra
Una entrada muy completa, con ambiente musical adecuado...
ResponderEliminarEstoy contenta de haberte conocido al participar en el concurso de Paradela.
Si quieres pasar por el bog hay un video-resumen que tal vez te apetezca ver.
Hasta siempre.