El tercer párpado


Gumi tiene tres párpados. No tenía ni idea de ello, hasta que Jesús, El Jefe, lo apuntó.


Resulta que al cumplir dos meses, nuestro cachorrillo, que está hecho un auténtico toro, ha salido al campo. Se hace cuatro kilómetros todos los días, entre pinos, niebla, hierbas de diversos aromas y carreras detrás de Berto, el padre de la criatura que ya empieza a ser más contemporizador con su hijo. ¡Uf, lo que le ha costado!


El caso es que el jueves, apreciamos en el ojo izquierdo del pezqueñín un derrame. Supusimos que se había golpeado con alguna rama o que le habría entrado alguna mota de la mierda que rebusca según corre.


El derrame resultó ser al día siguiente un abultamiento en el lagrimal. Eso ya nos alarmó, y avisamos al 112. Enterado El Jefe, ya digo Jesús, llegó con una jeringa llena de cortisona, ya sospechando lo que había en este asunto. Le pinchó primero, y luego le miró. Y dijo que podía ser algo sobre un tercer párpado, pero que él de eso no sabía gran cosa. Y así quedó el asunto, y se marchó, que tenía urgencias.


Me quedé un tanto mosqueado, porque Jesús, ya digo El Jefe, no suele dar tan magras explicaciones. Él generalmente llega, observa y actúa. Y en la práctica generalidad de las situaciones, vence; igual que aquel romano de veni, vidi, vinci.


Anduve inquieto el finde, y el domingo caí en la cuenta de que Internet está aquí, y sabe mucho de todo, o nada de nada, según y cómo. E investigué.


Pues es el caso que los gatos y los perros tienen tres párpados y dos lagrimales en cada ojo. Qué tíos, asín cualquiera. Los seres humanos también tendríamos que tenerlos, pero por el camino de la evolución se quedaron en algún recodo, criando malvas. Este tercer párpado o "membrana nictitante" es una proteccion adicional que actúa instantáea y fugazmente en caso de peligro para el ojo, recubriéndolo por entero y replegándose después. Y es tan rápido su abrir y cerrarse que, a pesar de que cubre por completo el ojo, no es posible detectar su movimiento.


En ciertas razas de perros este tercer párpado sobresale algo en la base junto al lagrimal. Y no tiene más importancia que marcar una seña de esa raza, dándoles a los animalitos un cierto aire de haberse pasado la noche entera de farra o de no haber pegado el ojo por culpa de un dolor de muelas.


Ocurre, sin embargo, que en los beagly, como el Gumi, puede darse una debilidad en la bolsa que contiene este tercer párpado cuando está en reposo, y permite que rebose, saliéndose un poco o incluso de forma llamativa.




Es el caso que tenéis en la foto: Gumi, mostrando esa masa sonrosada en su ojo vivaracho.


Pues dicen los entendidos que eso se llama  "prolapso de la glándula lagrimal del tercer párpado". Que normalmente no tiene importancia, y que avisa de alguna infección, o de la presencia de parásitos. Que suele aparecer en el primer año de la vida del animal, y que si remite, no significa nada serio.


Pero puede ocurrir que no remita, y que siga ahí. Entonces, siguen diciendo los entendidos, puede dejarse tal cual, porque no ocasiona ningún trastorno al sujeto animal. Pero si el sujeto humano que se considera propietario del sujeto animal tiene gusto por la estética, puede requerir a un especialista para que lo corrija con una técnica que jamás deberá suponer la supresión de este aditamento. De modo que no se trata de cortar nada, sino de volver a colocar en su bolsita lo desparramado, para que siga cumpliendo su misión, pero con medida.


¿Qué se calló El Jefe, me refiero a Jesús, porque no le dio la gana decirlo, no porque no lo supiese? Que la presencia de esa protuberancia o excrescencia, nada perjudicial en sí misma, sí podía ser aviso de algún otro mal, oculto y desconocido, que podría desenmascararse en un futuro cercano o lejano.




Al llegar a este punto, se me han saltado las alarmas: Gumi puede estar enfermo. Y ciertamente no lo parece, miradlo ahí cómo intenta morderme el dedo. Del mismo modo me agarra de los pantalones, me rompe los calcetines (ya van tres pares) o me mesa directamente las barbas. Pero pudiera estarlo…


Dos meses. El mayor de la manada. El más fuerte y también el más vivaracho. El torbellino que ha puesto a Moli y a Berto contra las cuerdas. El mismo que viste y calza, puede ser que enquiste una enfermedad…, que no quiero ni nombrar en este blog.


No cedo a la tentación de trascendentalizar este tema, extrapolándola a otras situaciones, y me quedo sólo con la consideración de que "es sólo un perro", repitiendo las palabras de otro Jesús, primo del Jefe, también veterinario, que sabe más de lo que parece de salud y de enfermedad, y no sólo de animales…


Yo os comunico que viva mucho o viva poco, qué más da, voy a disfrutar de este enano que ha llegado, no sé si en provisorio o definitivo, que sólo quiere jugar y que le saquen de paseo, que come y duerme a pierna suelta, y que en estos veinte días que está en casa ha engordado más de un par de kilos.

5 comentarios:

  1. Pero... ¿qué es eso de que es sólo un perro? Es un animalico del Señor, que lo dejó en este mundo, como a todos los demás, y como a todos los demás, con más o menos raciociocinio y todo eso, nos puede pasar lo que a Gumi, pero ya verás que todo va bien y se hace un perro adulto, con su tercer párpado y todo lo que haga falta.

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  2. No es sólo un perro, porque tiene nombre, el que tú le has puesto. Luego es tu perro. Apuesto a que podrías sentarte frente a él y mantener una conversación inteligente, si él no se empeña en ladrar y tú no te empeñas en hablar en castellano.
    Un abrazo.

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  3. Sea como sea, Gumi está precioso, tenga tercer párpado o no, tendremos que esperar esperanzados los acontecimientos venideros, y mientras, como bien dices, disfrutar con él a tope.
    Hace muchos años alguien me dijo" deja que tu corazón haga, lo que tu cabeza no puede", triunfó el corazón. Besos fuertes y achuchones.

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  4. Pues ya está Míguel, dile a Jesús, el Jefe, que de una vez te saque de la duda. Qué sospecha, por qué no habla, qué pruebas necesita hacerle a Gumi para confirma qué. Y mientras, amigo mío, no veo por qué hay que dar crédito a una de las posibilidades de lo que leíste en internet. Mejor te quedas con las otras y ya está. Y ya veremos, hay que preocuparse cuando toque no antes.

    Dicho esto ¡cómo te comprendo! es inevitable que se te disparen todas las alarmas cuando alguien que quieres puede estar enfermo sobre todo si te has dejado "comer" tres pares de calcetines, eso no se lo dejas hacer a cualquiera ¿a que no?.

    Esperemos que todo se quede en su tercer párpado prolapsado temporalmente y que de ahí no pase.
    Tú mismo dices que su aspecto no es para preocuparse. Si los perritos enferman como las personas, el que haya engordado, esté alegre, corra, coma ... es una señal estupenda. Pues eso, guapo. No nos hagas sufrir que Gumi también es un poco de todos nosotros.

    Besos

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