(Recogido de algún lugar… Pueden ser sólo palabras; si lo piensas, tal vez sean algo más…)
Corrijo, completo y pido perdón a Julita, que me lo mandó con todo el cariño que ella me tiene, indigno de mí, y con este mensaje, que publico para su conocimiento y divulgación:
"Sé que no te gustan los power points pero éste lo han hecho para ti sin conocerte pero como si....Besos mil"
Imposible atravesar la vida
sin que un trabajo salga mal hecho,
sin que una amistad cause decepción,
sin padecer algún quebranto de salud,
sin que un amor nos abandone,
sin que nadie de la familia fallezca,
sin equivocarse en un negocio.
Uno crece cuando no hay vacío de esperanza,
ni debilitamiento de voluntad,
ni pérdida de fe.
Uno crece cuando acepta la realidad y tiene aplomo para vivirla,
cuando acepta su destino, pero tiene la voluntad de trabajar para cambiarlo.
Uno crece asimilando lo que deja por detrás,
construyendo lo que tiene por delante
y proyectando lo que puede ser el porvenir.
Crece cuando se supera, se valora, y sabe dar frutos.
Crece cuando se abre camino dejando huellas, asimilando experiencias,
¡Y sembrando raíces!
Uno crece cuando se impone metas, sin importarle comentarios negativos
ni prejuicios, cuando da ejemplos sin importarle burlas, ni desdenes, cuando cumple con su labor.
Uno crece cuando se es fuerte por carácter, sostenido por formación, sensible por temperamento…
¡Y humano por nacimiento!…
Uno crece cuando enfrenta el invierno aunque pierda las hojas,
recoge flores aunque tengan espinas
y marca camino aunque se levante el polvo.
Uno crece cuando se es capaz de afianzarse con residuos de ilusiones,
capaz de perfumarse con residuos de flores…
¡Y de encenderse con residuos de amor…!
Uno crece ayudando a sus semejantes,
conociéndose a sí mismo
y dándole a la vida más de lo que recibe.
Uno crece cuando se planta para no retroceder…
Cuando se defiende como águila para no dejar de volar…
Cuando se clava como ancla y se ilumina como estrella.
Entonces… uno crece.
Experimento: He reconstruido este power points en Docs de Google y lo he copiado aquí, para que lo podáis ver, además de sólo leer.
Y parece que resulta y funciona.
P.D. prometo dar explicación a quien tenga interés por hacer lo mismo.
Muy bonito. Y cierto. Ahora lo que hace falta no es solo saber cual es la senda...sino animo y energia para recorrerla.
ResponderEliminarUn abrazo.
Es muy bonito el texto, y aleccionador. Mira, todas esas cosas que dice como sucesos en la vida, son lo que yo llamo los dolores inevitables, porque van en el mismo paquete de la vida, como en los coches, vienen de serie. Ahí es donde uno crece, con fuerza. Lo que no puedo admitir son los dolores innecesarios y evitables, como la miseria, la guerra, la falta de educación y sanidad, la pobreza mental. Eso, y ya lo hemos dicho muchas veces, es lo que no tiene perdón, porque incluso los dolores necesarios, inevitables, serían de otro modo en una sociedad solidaria y justa.
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