RUTA URBANA
Lunes, 20 de mayo de 2019.
20:15 h. Punto de encuentro: Plaza de San Pablo. Llegada: Monumento a Colón
(paseo de Recoletos). Duración aprox.: 90 minutos.
Itinerario: C/ Cadenas de San
Gregorio – Plaza de San Pablo – Iglesia de las Angustias – C/ Leopoldo Cano – C/
San Juan de Dios – C/ Lencería – C/ Duque de la Victoria – C/ Teresa Gil –
Plaza de España – C/ Miguel Íscar – Acera de Recoletos
1. Catalina
de Lancáster (Hertford,
Inglaterra, el 31 de marzo de 1373 -Valladolid, 2 de junio de 1418).
Donde hoy se erige el Colegio de San Gregorio, sede del Museo Nacional
de Escultura, a la vera del convento de los padres dominicos, se levantaba en
el siglo XIV uno de los palacios que Catalina de Láncaster mandó construir en
Valladolid. Reina consorte de Castilla -por su matrimonio con Enrique III de
Castilla, el doliente-, señora de la villa del Esgueva y primera
Princesa de Asturias, asumió la regencia de su hijo Juan II de Castilla, futuro
padre de Isabel la Católica. Ambos, madre e hijo, fallecieron en este palacio.
2. Ana María de Austria (Valladolid, 22 de septiembre de 1601 – París, 20
de enero de 1666)
Hija
de Felipe III y Margarita de Austria, su alumbramiento tuvo lugar cuando la
Corte del rey se instaló en Valladolid. Fue Reina de Francia por su matrimonio
con Luis XIII. Muchos de nosotros la conocemos por ser la “reina de los
Mosqueteros”…
3. Rosa
Aguado (s. XIX)
Durante la Guerra de la Independencia (1808-1812) no faltaron en
Valladolid heroínas vallisoletanas como Rosa Aguado y Nicolasa Centeno,
quienes, haciéndose pasar por amantes de los generales franceses Kellerman y
Dufresse, máximas autoridades castrenses y políticas napoleónicas en nuestra
ciudad, procuraron exhaustiva información a los guerrilleros, ayudando con su
actuación a la resistencia ciudadana frente a los invasores.
4. Juana I de Castilla (Toledo, 6 de noviembre de 1479 -Tordesillas,
12 de abril de 1555)
En el hoy Palacio de Pimentel, el 12 de julio de 1506 los procuradores
en Cortes juraron en este lugar a doña Juana como reina de Castilla, a don
Felipe como su legítimo marido y a don Carlos, su hijo, como príncipe heredero
(futuro Carlos V). En este lugar, Juana la Loca se convirtió en reina de
Castilla.
5. Emperatriz Isabel (Isabel de Portugal) (Lisboa, 1503 – Toledo, 1539)
Mujer
de grandes dotes organizativas, Isabel de Portugal gobernó los reinos españoles
con mano enérgica, desde el hoy Palacio de Pimentel,
durante los viajes por Europa de su marido, el emperador Carlos I. Este
matrimonio la convirtió, además, el título de Emperatriz de Alemania.”
6. Eylo Alfonso (s. XII – s.
XIII). De la esposa del conde Ansúrez ya hablamos en la ruta monográfica sobre
este personaje, repoblador y primer señor de Valladolid.
7. Beatriz
Bernal (Valladolid ¿1501/1504?
– Valladolid ¿1562/1586?) (S. XVI).
De Beatriz Bernal, única mujer autora de un
libro de caballerías –“Don Cristalián de España”–, ya hablamos dentro de la
ruta sobre los escritores vallisoletanos.
8. Mariemma (Íscar,
Valladolid 12 de enero de 1917–Madrid, 10 de junio de 2008)
Gran artista,
bailarina y coreógrafa, una de las grandes
de la danza española del siglo XX, Guillermina Martínez Cabrejas, conocida
artísticamente como Mariemma, hizo
del baile su razón de vida, actuando en los principales escenarios mundiales. En su afán por rescatar del olvido los
más puros bailes tradicionales y dar sentido propio al rico folclore español,
recorrió toda España, llevando a cabo una minuciosa labor de investigación,
pueblo por pueblo, para descubrirlos e incorporarlos a su repertorio. Su
quehacer artístico tuvo una amplia repercusión en Europa y América, tanto por
sus actuaciones como por sus coreografías. En 1955 creó el Mariemma Ballet de España y
en 1969 fue contratada como profesora de Danza España en la Real Escuela
Superior de Arte Dramático y Danza de Madrid, de la que llegó a ser directora.
En 1973 creó en una de las dependencias del Teatro Calderón una Escuela de
Danza, por la que pasaron multitud de alumnos vallisoletanos y que se convirtió
en todo un referente de la danza en Valladolid.
9. Marina Escobar (Valladolid, 1544–1633)
De esta influyente beata ya
hablamos en la ruta sobre Santa Teresa de Jesús, al mencionar cómo la Santa no
dejó que doña Marina profesara en el Carmelo.
10. Catalina Canseco (Piedrafita
¿? ca. 1573 – ¿?)
Hija de Pedro
Suárez Canseco e Inés Castañón. Uno de sus hermanos fue catedrático de Medicina
en la Universidad de Valladolid y médico del rey (Felipe II). Casó con un
salmantino comerciante de mercería y regentó varios comercios de tejidos, uno
de ellos en la esquina de la calle de la Lencería con la Plaza Mayor. Catalina
Canseco fue una mujer moderna, de carácter y muy emprendedora. Empresaria
durante más de cuarenta años, destacó por su intensa actividad mercantil,
inusitada para una mujer de su época. Benefactora de la ciudad de Valladolid, practicó
numerosas operaciones de tipo bancario y llevó la administración económica de
distintas casas de nobles y de varios conventos de monjas.
11. M.ª
Teresa Íñigo de Toro (Valladolid
25 de mayo de 1929 – Madrid 28 de marzo de 1988)
Fue la primera mujer en España en dirigir una emisora de radio (La
Voz de Valladolid) y durante mucho tiempo la única. Aunque licenciada en
Filosofía y Letras, Tere Íñigo desarrolló prácticamente toda su labor
profesional en la radio, que, junto con su amor a Valladolid, fueron sus dos
pasiones. Su sensibilidad, su solidaridad con los más desfavorecidos, su
cercanía con el ciudadano de a pie y su forma de hacer radio le llevaron
a obtener el "Premio Ondas" en 1961, además de otros múltiples
galardones periodísticos. Fue académica de Bellas Artes e incansable
trabajadora, desplegando su actividad literaria también en múltiples libros y
conferencias.
12. Teresa Gil (Portugal, ca. 1255 –Toro, Zamora, ¿1311?
De Teresa Gil de
Riba de Vizela, hija de los nobles portugueses Gil Martín y María Anes de Maia,
se afirmó durante mucho tiempo, erróneamente, que era hija natural del rey
Alfonso III de Portugal. Tuvo muy buenas relaciones con la monarquía castellana
de su época, y con frecuencia se dice que gozó de los favores del vallisoletano
Sancho IV, que la hizo señora de Zaratán y Arroyo entre otros privilegios.
Instalada en la villa castellana, manutuvo un gran nivel económico, llegando
incluso a tener “esclavos”. Hizo sustanciosas donaciones a los dominicos y
franciscanos de Valladolid, y fue siempre muy generosa con los pobres y
menesterosos del lugar. La calle que lleva su nombre es la calle vallisoletana
que conserva el mismo nombre desde más antiguo: 1369 la primera mención. A
pesar de no ser religiosa, fue abadesa del monasterio de Las Huelgas de
Valladolid. Su gran “fundación” fue el convento de Sancti Spiritus de Toro,
donde está enterrada.
13. Rosa Chacel (Valladolid, 3 de
junio de 1898 – Madrid, 1994).
Rosa Chacel, de quien ya hablamos dentro de la
ruta sobre los escritores vallisoletanos, nació en la calle de Teresa Gil.
14. Magdalena
de Ulloa (Toro, Zamora, 1525 - Valladolid, 11 de junio
de 1598)
Magdalena de Ulloa fue una mujer muy piadosa, que fundó en Valladolid
(donde hoy se erige la iglesia de los Capuchinos de la plaza de España) un
cenobio de monjas dominicas, llamado “San Felipe de la Penitencia”, dedicado a
la corrección espiritual de las mujeres de vida "alegre". Por ésta y
otras obras de caridad, a doña Magdalena se le conocía en su época como la madre
de los pobres. Casada con Luis de Quijada, mayordomo mayor de Carlos I, se
encargó del cuidado y ocupación de Jeromín –Juan de Austria– hijo
natural del Emperador, al que educó en las artes, las letras, la religión y el
manejo de las armas.
15. Marcelina
Poncela Ontoria (1867-1917) (Valladolid 02/06/1864 –
31/07/1917 Quinto de Ebro-Zaragoza)
Marcelina Poncela Ontoria, pintora vallisoletana de repercusión
nacional, fue alumna del pintor, académico e investigador José Martí y Monsó en
la Escuela de Bellas Artes de Valladolid. En 1882 marchó a Madrid, siendo
pensionada por la Diputación Provincial y por el Ayuntamiento de Valladolid
para ampliar sus estudios en la Academia de San Fernando. En 1884 formó parte
del grupo de las primeras seis mujeres que se matricularon en la Escuela
Especial de Pintura, Escultura y Grabado, con un permiso especial del Rey.
Participó en todas las Exposiciones Nacionales celebradas entre 1892 y 1915,
obteniendo distintos reconocimientos, así como a las Bienales del Círculo de
Bellas Artes y a la Exposición Internacional de 1892, donde obtuvo una mención
Fue la madre del comediógrafo Enrique Jardiel Poncela.
16. Las “Cervantas”. Sobre las mujeres que vivían con Miguel de
Cervantes en la calle Rastro, durante su estancia en Valladolid, ya hablamos en
la ruta sobre Cervantes en Valladolid.
16. Mujeres
vallisoletanas que se fueron a América en los siglos XVI y XVII (S. XV- XVII)
Tras el descubrimiento de América, en los siglos XVI y XVII, 161
valerosas mujeres vallisoletanas marcharon a América. Su papel como
transmisoras de nuestra cultura y de la identidad del pueblo español fue
determinante en la formación de la sociedad indiana, trasladando el modelo
social castellano -usos y costumbres, lengua, mentalidad, religión- al otro
lado del Atlántico y contribuyendo con ello al desarrollo de las Indias.
Hola, en el resumen de la vida de Teresa Gil DE RIBA DE BIZUELA, la imagen que aparece con el hábito creo que es errónea, aunque se publica en prácticamente todas las páginas. Ella, como bien indicas, no llegó nunca a tomar los hábitos porque no quería ser religiosa, de hecho fue enterrada con ropajes no religiosos, que son los que se conservan en el museo de Toro. En la página de la Real Academia de la Historia, aparece el retrato de Teresa Gil DE VIDAURE y esta si era religiosa, de hecho el hábito y la cara son similares al retrato que está aquí publicado.
ResponderEliminarHola, soy la misma persona que ha hecho el comentario del retrato. Acabo de hablar con una persona que es entendida en historia de Valladolid y me ha rectificado. Este retrato si es de Teresa Gil de Riba de Vizela (Portugal-Valladolid-Toro), lo que ocurre es que se lo hicieron un siglo después de su muerte y el pintor decidió ponerla hábito con las llaves (símbolo que representaba a las abadesas), aunque sí es cierto que nunca quiso tomar los hábitos, ya que fue abadesa por obligación y fue enterrada con ropa no religiosa, que es la que está en el museo de Toro expuesta. Disculpa las molestias. Enhorabuena por la página.
ResponderEliminarGracias por acercarte a este lugar y comentar. Casi lo tengo olvidado…
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