Trece y martes

 

Mientras le daba a la plancha, estirando una miaja el paño de altar y el alba que acabo de lavar (hoy tocaba colada), y dado que esta actividad, el plancheo, no es de mi devoción, elucubraba tratando de imaginarme en encomienda más provechosa. Quitar arrugas es oficio vano, como el quitar el polvo cuando tu casa y tu calle están en la misma línea de flotación y el tufo de los escapes entra por tu ventana como el aire que respiras.
Hoy hace cinco meses que murió Derio, el albañil y otros oficios, que no veía problema ante mis quiméricas transformaciones de estos edificios en ruina que aún se mantienen en pie milagrosamente. Yo lo pensaba, él lo realizaba.
Ha vuelto a salir la humedad en los bajos de la sacristía. ¡Cómo no! Han subido la calle casi un metro, y han puesto un jardín justo contra la fachada. ¡Si no regamos!, contestan los del servicio municipal de jardines. ¡Cómo vais a regar con lo que ha llovido! ¿Estáis ciegos para no ver que es barro? Y así.
Termino de rematar, o eso creo, la reflexión para la celebración comunitaria de la reconciliación. Y por teléfono ¿cuándo van a ser las confesiones? Respondo, pero pienso que si estará bien que vengan sólo a eso y no a lo demás. Lo dejo, que me entra complejo de supermercado.
Llega Mariano con dos flores de pascua exuberantes. ¡Que no las quiero, que se mueren! Ha dicho Ele que las traiga, y yo obedezco. Que duren lo que duren. Además, tú tienes mano con ellas y te duran por lo menos hasta el verano. Y aquí me las dejó. Adornarán al Niño.
Aparece Cheihk con su familia. (Todo el mundo le llama Sergio, pero su nombre es Cheihk, que le nacieron en Senegal) ¡Qué tal! me repite mil veces. Respondo otras tantas. Y luego suelta: dice Abdulai que te diga que su novia ha tenido una niña. Rumio un instante y suelto: o sea, que Abdulai ha tenido una niña, ¿no? ¡Sí! Acabáramos; el hipérbaton últimamente me tiene turulato. Supongo, pienso para mí, que habrá venido con un pan bajo el brazo. Paso del pensamiento a la palabra y se lo digo al abuelo. Dice no entender. Se lo explico y rompe a reír. No pensar, chicos jóvenes, responde. Ni su hijo ni la novia de su hijo tienen trabajo. A la criatura recién nacida habrá que cuidarla entre todos. De momento se ha ido con el coche hasta las trancas.
Se hizo la luz. Casi una semana han estado las dos farolas de la calle sin lucir. El 010 es instantáneo, pero sólo para recibir quejas. Los otros servicios municipales van un poco más despacio. Ayer tuvimos que dar todas las luces de la parroquia para que los padres y los niños de catequesis se pudieran reconocer. Afortunadamente no hubo pérdidas irreparables.
Está a punto de terminar el día. Una moza viene a enterarse, porque se va a casar. Tras el coloquio resulta que viene buscando una segunda consulta; la boda ha de ser en marzo, otros curas ya están en el asunto y ella tiene sus dudas. Se las he confirmado; no lo tienen fácil, salvo que se encuentre algún atajillo. Me lo agradeció y se fue asegurándome que me tendría informado.
Coloco la escalera bajo el reloj de péndola y ajusto la sonería para que suene a modo noche. Así da la hora, la media y los cuartos, pero suavecito. No necesitamos que nos martillee el tímpano, tanto si estamos en silencio como si cantamos o rezamos. Aturdido me quedó el otro día, dando la hora en plena plegaria eucarística. La concurrencia ni rechistó. ¡Menos mal que era la una!
Recibo por correo enlace con dirección a google maps. Es la geografía(1) de la corrupción en mi país. Miro mi provincia de nacimiento, y ¡está limpia!

¡¡¡Viva Palencia!!!


Piadosa costumbre, muy popular en mi pueblo




2 comentarios:

  1. te recomiendo que no pongas música en el blog, es un poco incómodo si paso a visitarlo y estoy escuchando algo en mi ordenador que se mezclen las canciones y suene un algarabía sin pies ni cabeza, y como ya habrá más

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  2. Lo del mapa me ha dejado desolada aunque ya lo supiera. Nunca comprenderé porqué hay tanta gente sin vergüenza y sin decencia. Pues anda que lo del yernísimo tiene bemoles. ¿En qué piensa esta gente? En fin, como ves es el día de las preguntas retóricas, lo siento.
    Siento lo de la humedad porque es un contratiempo serio. Lo de la plancha es lo más suave del día ¿no?.

    Besos

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