La bicicleta será transporte “preferente”
Esta es la noticia que me ha tocado en el desayuno. Lo escuché en la radio. Y o bien estaba aún dormido, o bien me sonaba a tomadura de pelo. El caso es que no me la creí. Si estamos en febrero, me dije, hace ya tiempo que pasaron los inocentes…
Luego comprobé que era cierta la información, y que si nada ni nadie lo remedia, vamos a pasar los ciclistas de ser esos molestos y/o descarados -según lo piensan los conductores o los peatones- a convertirnos en la “niña bonita” de este mus vital en que jugamos.
Veremos qué nos depara el porvenir.
A mí, sea cual sea por último la fórmula final de la ley u ordenanza correspondiente, no me gusta nada ir por las aceras, ni cerca ni lejos de las fachadas, porque las personas que caminan no entienden que un vehículo les asuste, mucho menos que les avasalle, cuando pasean con prisa o con calma por su pueblo o ciudad.
De modo que seguiré mi costumbre de circular por la calzada, no por el medio, sino hacia mi derecha. Aunque también he practicado, en esto debo ser un adelantado, la izquierda, mirando de frente al vehículo que se acerca, y calculando las distancias que nos permitan cruzarnos sin molestar.
Bien mirado, esto de ir en bici por la calzada tiene mucha similitud con el que pasea por una carretera sin arcén; es mejor ir por la izquierda para no verse sorprendido por la espalda, ni quedar cuellitorcido de tanto girar la cabeza para prevenir.
Todo menos estorbar. No me gusta nada. Si hay suficiente espacio, dejarme adelantar no me molesta. Que pasen, que no me hagan ir más deprisa, que no me amochen impacientes; cada cual que vaya a su ritmo.
¡En fin! Que todo salga bien y ojalá los ciclistas por fin dejemos de ser las moscas cojoneras del tráfico urbano.
Sería estupendo que volviéramos a llenar las calles de bicicletas de todos los estilos y colores; podríamos hablar en la vía pública sin darnos voces y oleríamos mucho menos a aceite quemado.
No necesito demostrar a nadie lo mucho que me gusta la bici. Pero por si hiciera falta alguna prueba, ahí van algunas.
Pues ya va siendo hora de que "las bicicletas sean para la ciudad" así en algunas como Madrid, se podrá respirar.
ResponderEliminarTodo llegará, ya lo verás!